25 de agosto de 2010

CAPITULo 10 - Un dia malo

Le ignoré y seguí andando, si me paraba llegaría tarde.
- Espera,- dijo mientras me cogió del brazo- por favor.
- ¿Qué quieres? Voy a llegar tarde y como me pase un solo minuto ya no saldré en toda mi vida- dije en un tono borde.
Se quedó mirándome de arriba abajo.
- ¡Uau! Nunca he visto a una chica con tantas bolsas.
- ¿Has venido a decirme eso?
- ¡Ah! No, lo siento, era que… si te venias mañana a pasar el día en la playa, ¿qué te parece?
- Eee…, me pilla de sorpresa, pero vale.
Sergio sonrió ligeramente, aunque yo se lo noté
- Vale, pues de 11:00 a 11:30 en la playa de siempre.
- Vale, adiós
- Adiós.
Miré el reloj y eran las 21:45.
- Susan, veo que no llegamos.
- Tranquila que si.
Llegamos justo a tiempo. Cuando entré ya estaban cenando pero no me importó.
- Hola
- Hola hija, tienes unos cachos de pollo en el microondas.
- Vale, mamá. A por cierto mañana voy a pasar el día en la playa.
- No hagas nada malo.
- Siii mamá.
Cené lo más rápido que pude y me subí a mi habitación. Quería dormirme ya para que llegase un nuevo día y estar en la playa con ellos.
Piiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii.
Sonó el despertador y me levanté bastante ilusionada.
Bajé a desayunar y me subí de nuevo a mi habitación.
Me puse mi bikini favorito, uno blanco con corazones negros y rosas. Me puse encima mi vestido blanco y me hice una coleta alta.
Preparé toda la comida, una toalla y demás cosas que posiblemente usaría.
Cuando eran las 11:00 bajé corriendo.
- Adiós mamá, adiós papá, no se a que hora volveré.
- Vale, pero ten cuidado- me dijo mi padre.
- Vale, adiós- dije mientras salía por la puerta.
Fui dando brincos hacia la playa y cuando llegué me di cuenta de que era la última.
- Hola a todos.
- Ya era hora- me dijo Allison.
- Bueno subamos al coche- dijo Sergio mientras tiraba las llaves al aire y luego las cogía.
- ¿Cómo que al coche?
- Ah no te lo dije, vamos a una playa no muy lejos de aquí, ¿no te importa verdad?
- No, claro que no, era solo que no lo sabía.
Estuvimos por la carretera durante 20 minutos. Cuando aparcó el coche me quedé sorprendida, era la mejor playa que había visto nunca.



Era grande y no había mucha gente.
- Que pasada-dije con la boca abierta.
- Si, pero cierra la boca que te van a entrar moscas- me dijo Jessica.
- Que graciosa.
Preparamos el “chiringuito” y fuimos todos directos al agua. Ese día estaba bastante tranquila. Estábamos Allison, Jessica y yo hablando tranquilamente cuando noté unas manos sobre mi cabeza que me hundían y no me dejaba salir. Estaba intentando escapar cuando lo vi todo negro.
- Silvia, por favor, despierta.
En ese momento abrí mis ojos lentamente y eché algo de agua por la boca.
- ¿Qué ha pasado?
- Nada, aquí el graciosillo de Sergio que le ha apetecido hacerte una ahogadilla y has perdido el conocimiento.- dijo Allison mientras miraba a Sergio.
Noté unos pasos fuertes viniendo hacia a mí.
- ¿Estas bien?- me preguntó Sergio.
- Si, no te preocupes ¿vale?- dije mientras me sentaba
- ¿Seguro?
- Si.
Estuvimos pasando la mañana hablando, jugando a las cartas, con el balón y así hasta la hora de comer.
Cada uno nos comimos nuestro bocadillo y después me puse a tomar el sol.
- Silvia, ¿te vienes al agua?- me preguntó Jessica mientras se sentaba a mi lado.
- No, ir vosotros.
- ¿Por qué no quieres?-siguió insistiendo.
- No me apetece y ya esta, no quiero dar explicaciones.
- Vale, por cierto, esta noche se viene Allison a dormir a mi casa, ¿te vienes tu también? Vamos a estar aquí hasta muy tarde.
- Voy a llamar a ver si me dejan.
Todos se fueron al agua, menos yo que me quedé en mi toalla.
Llamé a mis padres mientras se bañaban todos.
- ¿Mamá?
- Silvia, ¿te ha pasado algo?
- No, estamos bien, era por si me dejabas quedarme esta noche con Jessica, porfaaa.
- Vale
- Gracias mamá. Adiós.
En cuanto guardé el móvil en la mochila oí unas risas cada vez más fuertes y cuando estaban a mi lado me tiraron un cubo de agua encima.
Fueron Sergio y Collin.
- ¿Estáis tontos?
- Eh, relaja los humos, que cambio de antes a ahora-dijo Collin molesto.
- Pues dejadme en paz, por favor- me di la vuelta, me envolví en la toalla y cerré los ojos.
Esperé a que se fueran al agua para abrir los ojos y hacer algo que me distrajera. Al cabo del rato me senté y alguien me tocó por detrás.
- ¿Te pasa algo hoy?- me preguntó Sergio.
- No
- Yo creo que sí.
- No, nada, en serio.
- ¿Estas enfadada conmigo?
- No lo sé.
- Eso es un si.- dijo en tono muy bajo.-De verdad que lo siento.
- Lo hecho echo está y punto, olvidémoslo ya, por favor.
- De acuerdo, pero ¿te vienes a bañar?
- Contigo no. Luego me meteré yo tranquilamente.
- Vale.
Y se fue de nuevo al agua.
A los 5 minutos llegaron Allison y Jessica.
- A ver cuenta, cuenta ¿qué te ha dicho?
Se lo estuve contando, no tarde demasiado y cuando todos salieron del agua fui yo.
- Me voy a bañar.
Mientras iba hacia la orilla escuché algunos cuchicheos.
- Que rara esta.- oí decir a Oliver.
Estuve a mi aire, buceando y buscando conchas por el agua. Todos me estaban mirando y comentando mi comportamiento, pero me daba igual lo que dijeran. Como suelo aguantar mucho pues me sumergí a buscar más conchas y al ver que no salía del agua, Sergio vino en mi busca y todos se acercaron a la orilla.
Me cogió de un brazo y me sacó del agua.
- ¿Estas bien?
- Si, hasta que tu has llegado.
- Es que tardabas en salir.
- Aguanto mucho bajo el agua.
Me solté del brazo que todavía me tenía agarrada y salí del agua para secarme con la toalla mientras todos se quedaron paralizados ante mi actitud.
Puesto que estaba anocheciendo, los chicos hicieron una pequeña hoguera, ya que por las noches hacía frío, pero yo estaba sola alejada apoyada en una palmera, no quería estar con nadie.
Eran cerca de las 12 de la noche, yo ya me había comido un bocadillo, pero empecé a tiritar y alguien me tocó el hombro.
- ¿No vas a venir? Allí se está mas calentito.
No contesté, solo me salió darle un abrazo.
- Lo siento, es que después de lo de esta mañana y los comentarios que hacíais no quería estar con nadie, lo siento.
- No pasa nada pequeña.-dijo respondiendo a mi abrazo.
Miré hacia la hoguera y vi a Jessica sonreír.
Estuvimos un rato charlando y ya pasada la 1 empezamos a recoger.
- Bueno, entonces te vienes a mi casa ¿no?
- Si
- Pues vamos-dijo Allison muy alegre.
Nos despedimos de todos y fuimos andando hasta la casa de Jessica.

1 comentario:

Gracias por comentar. El blog se alimenta de tus comentarios.